Coque Malla es el encargado, junto a Alondra Bentley, de inaugurar las actividades del MaF, las cuales sirven como antesala de la 19 edición del Festival de Málaga. Cine Español. El músico madrileño, que presenta nuevo trabajo, El último hombre en la Tierra, se subirá hoy (21.30 horas) al escenario del Cine Albéniz para presentar sus nuevos temas y cantar algunas canciones junto a Bentley. Masqltura ha hablado con él sobre su nuevo trabajo y la situación actual de la cultura.
¿Qué tiene de especial este último trabajo? ¿Qué novedades trae El último hombre en la Tierra?
Lo que distingue a este disco de una manera especial son los arreglos de cuerdas y de vientos que ha hecho Miguel Malla, mi hermano. Estos arreglos le dan un carácter más complejo a la armonía. Normalmente, las armonías de rock y pop son más básicas y, con esos acordes, se pueden hacer cosas increíbles. Pero he querido ir más allá y buscar acordes más complejos y ampliar un poco el espectro armónico.
Lleva muy poco tiempo a la venta, pero ya habrá podido tener feedback con la gente…
El recibimiento está siendo impresionante. Es abrumador la unanimidad y el entusiasmo que está demostrando todo el mundo. La gente de la profesión está siendo muy generosa, y eso es lo que más le emociona a uno. La crítica también está siendo brutal. Y el público. Está funcionando muy bien. Está muy fuerte en ventas y estamos agotando entradas en todos lados. Estoy muy contento. Viene por delante un año muy bonito.
Se sube a un escenario, de nuevo, con Alondra Bentley, una de sus «mujeres», y con ella une, una vez más, música y cine. ¿Qué veremos en ese concierto?
Va a ser un concierto de dos personas que han colaborado mucho, yo creo que por afinidad de todo tipo. Tenemos muchas influencias en común y muy fuertes además. Ambos somos grandes amantes de The Divine Comedy, un grupo de Neil Hannon, y también grandes amantes del cine. Entonces tiene mucho sentido que Alondra y yo coincidamos en un escenario. Alondra colaboró en Mujeres, en una canción que me encargó TCM… Es un concierto muy especial, que no se va a repetir. Es único, porque no es parte de una gira. Yo voy por una carretera principal, que es mi gira y la presentación de mi disco, y aquí es como que cojo un desvío y me meto en un concierto que no forma parte de ninguna gira. Es una cosa única y especial que organiza el Festival en colaboración con TCM, de dos personas que han colaborado juntas y que aman el cine. Va a ser muy especial. Los dos haremos nuestros shows, algo más cortos de lo normal, y luego nos hemos reservado unos buenos minutos para hacer canciones juntos. Tengo muchas ganas. Es de los conciertos que más me apetecen de toda la gira.
¿Había venido al Festival de Málaga antes? ¿Le hizo ilusión que le llamasen para inaugurar las actividades culturales de esta antesala del Festival?
No he ido nunca, pero me hizo mucha ilusión. Con un concierto así, más todavía. Si hubiese sido yo solo, hubiese sido bonito también, pero sería un concierto más. Pero ésto, con la particularidad del concierto con Alondra, es perfecto.
El cine lo tiene algo más apartado ahora. ¿Tiene ganas de retomar esa faceta cinematográfica?
El cine no es algo que haya apartado ni que tenga que pensar en retomar, sino que cada vez me siento más músico y le dedico más tiempo a esta profesión. Así, uno se va alejando inevitablemente de la otra. Mi profesión es la de músico, pero a veces se unen una serie de circunstancias que propician que yo haga una película, y eso lo disfruto mucho y aprendo muchísimo. Un rodaje es una experiencia muy potente en la vida del ser humano, es un viaje. Compartes familia con personas que luego no vuelves a ver. Es una cosa muy especial, y me encanta vivir esa experiencia de vez en cuando, pero es una cosa anexa a mi verdadera profesión, que es la de músico.
¿Y en la música ve algún día el final o, simplemente, hasta que el cuerpo aguante?
A lo que significa tu vida no le puedes poner fecha límite. Hay muchas maneras de subirse a un escenario. Está Mick Jagger, que no para de pegar botes, pero también está B. B. King, que hasta que murió, se sentaba en una silla y tocaba blues. La música no tiene por qué estar reñida con la edad. Ser futbolista, sí, pero tocar un instrumento o cantar, no. Sinatra cada vez cantaba mejor. Cuanto más mayor era, mejor cantaba.
Música y cine, dos sectores complicados actualmente. ¿No es fácil ahora vivir ni de una cosa ni de la otra, no?
No es fácil vivir, en general. No sé si la música y el cine son los peores ejemplos. Quizás hay ejemplos más complicados. Vivir es duro y hay que luchar y echarle imaginación. A mí no me sale el lado derrotista. Yo me concentro en el proyecto que quiero hacer y voy a por él. Hay veces que tengo que remar siete veces y hay veces que tengo que remar dos. Creo que esa es la manera, y no planteándose si hay crisis o no o si está difícil o no. Lo más difícil es tener un proyecto, una canción o un disco bueno en la cabeza. Si lo tienes, lo sacarás adelante como sea.
Pero quizás debería hacerse algo para que en este país se valorase y respetase más la cultura.
Eso lo tiene que hacer el público. Creo que si la gente compra cultura y va a conciertos masivamente, no hay crisis ni gobierno que pueda con eso.
Para eso, una reducción del IVA, ayudaría.
Sí, por supuesto, pero no estoy seguro de que antes del IVA, la industria de la cultural en España fuese de las más boyantes. La excusa del IVA nos sirve un poco a todos para refugiarnos y no mover el culo. Hay que dejarse de excusas, de señalar, y acudir a conciertos, exposiciones, leer, ver programas de cultura… La televisión no te cobra un 21% por poner un canal de música, en cambio, cuando aparece música en la tele, la gente cambia inmediatamente de canal. Eso habría que analizarlo.
